El Big Data está revolucionando la industria de los seguros, como herramienta clave para la innovación. El uso adecuado de Big Data podría proporcionar agilidad comercial y eficiencia operativa dentro de las aseguradoras, ayudando a identificar modelos predictivos que reduzcan costos, perfiles de clientes o posibles solicitudes de fraudes.
En la era del internet la información se genera y acumula a una velocidad exorbitante, cada acto, cada clic, cada descarga en la web genera un dato albergado en sistemas de almacenaje, listo para ser clasificado y tramitado. El Big Data es el proceso masivo de recolección y análisis de información a través de herramientas digitales, es decir, el encargado de procesar cada uno de los datos que se generaron por el usuario.
Si bien el Big Data es una herramienta aplicable a cualquier industria, son grandes los beneficios que puede aportar a las compañías de seguros, que hasta hace no mucho tiempo mantenían su almacenaje en sistemas tradicionales.
Aunque por el momento, muchas aseguradoras usan el Big Data mayormente para los productos de vida, salud y automóviles, este sistema de almacenaje puede adaptarse a cualquier modalidad de seguros satisfaciendo la demanda de manera eficaz, veloz y personalizada.
Los clientes actuales son cada día más exigentes, por lo que el análisis de tendencias puede mejorar la experiencia de compra y la personalización de los productos adaptados a los individuos. Un algoritmo adecuado facilita el análisis de comportamiento, gustos y tendencias de los usuarios, para ofrecer recomendaciones afines a sus necesidades reales.
Otra de las ventajas importantes es la prevención de siniestros y fraudes. El análisis de datos permite encontrar tendencias en los patrones de los usuarios y generar protocolos de bloqueo ante posibles fraudes, tanto en las solicitudes como en las reclamaciones.
Con la implementación del Big Data vienen de la mano otras herramientas cruciales para la transformación digital del sector asegurador, como lo es la Inteligencia Artificial, el Business Intelligence y la ciberseguridad, cuyo uso promete potenciar los procesos operacionales, facilitando el conocimiento del cliente, el análisis de perfiles de compra y de riesgos, la captación de clientes potenciales, la personalización de oferta y la reducción de fraudes.
Fuentes:
IMF, septiembre 2021.
Power Data, agosto 2020.
Zendesk, julio 2021.