El 2008 fue un año particularmente desfavorable a la industria automotriz que se vio afectada severamente por la situación financiera global. Las ventas de unidades nuevas sufrieron una reducción de alrededor del 27%, lo que coloca a esa industria en niveles críticos en todos los países donde tienen presencia.
Lo anterior tuvo importantes efectos en el sector ya que un considerable porcentaje de las primas provienen del aseguramiento de unidades nuevas.
Un comportamiento satisfactorio
Tomando en cuenta la situación que prevalece en la industria automotriz, el comportamiento de las operaciones de Automóviles puede considerase satisfactorio ya que prácticamente se mantuvo en los mismos niveles de prima del ejercicio anterior.
El resultado observado fue posible, entre otras medidas, por el ajuste oportuno en las tarifas ya que al elevarse los índices de robo, especialmente en autos particulares, la siniestralidad requirió mayor captación para hacerle frente.
Por su parte, el ramo de Camiones mostró un incremento del 4.01% derivado de los ajustes citados y de una moderada cancelación de pólizas toda vez que las unidades están activas y en consecuencia se mantienen cubiertas por el seguro.
Se espera continuidad a la baja
Independientemente de que se anuncia una terminación de la etapa crítica de la situación financiera hacia agosto del presente año, se espera que la contracción en la venta de unidades nuevas de automóviles se recupere hacia el final del año o hasta el 2010, lo que continuará impactando desfavorablemente estas operaciones.