El avance de la pandemia por el mundo y la necesidad de realizar las actividades cotidianas desde casa, han incrementado significativamente el riesgo de sufrir ataques cibernéticos, vulnerando los datos personales y la seguridad de los millones de usuarios y compañías que hoy navegan en internet.
Con la educación a distancia, el trabajo remoto y las compras en línea, los cibercriminales han encontrado el ambiente propicio para vulnerar a los usuarios de internet, que de un día para otro se encontraron utilizando sus computadoras y dispositivos personales para realizar tareas que, en muchas ocasiones, contienen información sensible, pese a que estos dispositivos, en su mayoría, no cuentan con software adecuado para cifrar la información que se comparte.
Si los riesgos cibernéticos iban en aumento, con la nueva normalidad su aceleración ha sido exponencial, dejando desprotegidos los datos financieros e identidad de millones de usuarios, al igual que los documentos confidenciales de las empresas e instituciones y las conversaciones que se realizaban en privado que ahora se llevan a cabo en plataformas de videoconferencias con sistemas susceptibles al hackeo.
Stephen Simchak director internacional de la American Property Casualty Insurance Association, informó durante el Encuentro Digital COVID-19: Perspectivas del Sector Asegurador, sobre algunos de los nuevos peligros a los que se enfrenta el mundo en tema de seguridad cibernética, asegurando que los delincuentes también se encuentran reaccionando a la situación actual y sacando provecho del factor sorpresa por el que atraviesan todas las industrias.
Simchak comentó que América Latina podría considerarse como la zona con mayor riesgo ante el ciberdelito, ya que los negocios de la región se encuentran menos preparados en tema de digitalización, en comparación con regiones como Asia y Estados Unidos donde los sistemas digitales llevan años de aplicación.
Sin control en las redes corporativas y sin conocimientos adecuados de los usuarios, los ataques cibernéticos han aumentado considerablemente a raíz de la pandemia, sobre todo el robo de información. Previo a la aparición de la COVID-19, ocurrían alrededor de 600 ciberataques diarios en América Latina y el Caribe, durante el confinamiento esa cifra aumentó a 9.5 millones diarios en los primeros trimestres del 2020, agregó Simchak.
Para la industria aseguradora el tema de la seguridad digital deberá ser una las prioridades tanto en estos momentos de crisis, como en el futuro, pues al resguardar información sensible de los asegurados, el sector se coloca como posible blanco para los delincuentes cibernéticos.
Por otro lado, la susceptibilidad actual podría ser el factor clave para la adquisición y crecimiento de las pólizas de seguro contra riesgos cibernéticos, que ya son ofrecidas por diversas aseguradoras de todo mundo como una alternativa para mitigar la incertidumbre de miles de usuarios y corporaciones.
Simchak afirmó que conforme los riesgos se transformen, será indispensable que las aseguradoras avancen en consecuencia, dando respuesta a las necesidades de la vida actual, mejorando los productos que se encuentran en el mercado y creando aquellos que surjan tras la crisis, pues la pandemia, aún con todos los desafíos, también ha brindado la oportunidad de generar cambios y propiciar una rápida evolución para la industria de los seguros.
Fuente:
Encuentro Digital COVID-19: Perspectivas del Sector Asegurador