Al cierre del 2018, GNP Seguros reportó que el 24.5% de las más de 652 mil pólizas vigentes de Seguro de vida individual contaba con un componente de ahorro, 9.38% correspondía al seguro educativo. En ese mismo año, la firma pagó más de 1,800 millones de pesos correspondientes a las pólizas “Profesional”, el seguro de vida con componente de ahorro para la educación, que cumplieron el plazo de ahorro contratado.
Se trata de un producto financiero que puede adquirirse con pagos mensuales, trimestrales, semestrales o anuales y tiene el objetivo de que, al cumplir 18 o 22 años, el menor reciba la suma asegurada para continuar con sus estudios.
Los seguros educativos representan una alternativa para respaldar el futuro de los hijos, y garantizar a la vez la seguridad económica de la familia cuando éstos llegan al nivel superior y se puede acceder a ellos de diferentes formas.
La Encuesta Nacional de Deserción Escolar en la Educación Media Superior, revela que la falta de recursos económicos es el principal factor para que los estudiantes no concluyan su vida académica, sin embargo, el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), asegura que alguien que concluyó la licenciatura, gana en promedio 80% más que una persona que sólo tiene el bachillerato.
Fuente: Expansión.