EL SECTOR, LA SALUD Y EL ENVEJECIMIENTO POBLACIONAL
Por encima de las metas y presupuestos de ventas en las operaciones de Accidentes, Gastos Médicos y Salud, el Sector Asegurador tiene un compromiso con la población enfocado a mejorar su calidad de vida en términos de prevención de la salud y resguardo del patrimonio cuando éste se ve afectado por las erogaciones derivadas de padecimientos
MEXICO ENVEJECE… ¿SANO?
La población mexicana se encuentra en un proceso de envejecimiento, la esperanza de vida aumentará de 75 años en 2000 a 82 años en 2050, lo que supone representar un factor de desarrollo en términos de hábitos sanos en general. Éste fenómeno poblacional trae consigo retos diversos; entre ellos los relativos a la generación de recursos para la manutención de un creciente sector de la tercera edad y la calidad de vida de sus integrantes. De ahí que los problemas de salud de adultos y adultos mayores serán, por lo tanto, el componente que más atención demande.
Por ejemplo, en lo que respecta a las enfermedades no transmisibles, un factor de riesgo importante es la obesidad y el sobrepeso, donde México ocupa el primer lugar a nivel mundial, tanto en niños como en adultos. Vinculado a ese problema, se encuentran las enfermedades crónicas (hipertensión arterial, accidentes cardiovasculares, entre otras), que se traducen en altos costos de tratamientos y, paradójicamente, en una disminución en la esperanza de vida.
Por otra parte, la diabetes, cuya prevalencia se estima en 10.7% a nivel nacional en personas mayores de 20 años, es la primera causa de muerte en las mujeres y segunda en los hombres, consume importantes recursos para la salud y afecta de manera alarmante la salud de la población.
De lo anterior se deriva la urgente implantación de medidas para lograr cambios favorables en los indicadores de salud en el mediano y largo plazo, promoviendo acciones enfocadas a la prevención y hábitos saludables. La experiencia internacional demuestra que sí es posible hacerlo y como consecuencia, algunos países han logrado modificar hábitos, disminuir enfermedades y reducir costos.
PREVENIR ANTES QUE CURAR
En México, si bien es cierto, que el gasto público en salud en prevención ha aumentado de 500 millones de pesos en 2000 a 15 mil millones de pesos en 2010, la inversión aún es insuficiente, ya que se invierte 11 veces menos en atención preventiva que en atención curativa.
Es decir, si se destinaran mayores recursos a la prevención, se podrían tener considerables ahorros en el tratamiento y curación de enfermedades ya que estas, ocasionadas por la baja prevención, no ocurrirían. Esta estructura de gasto es sumamente costosa para la sociedad en su conjunto.
ESTRUCTURA DE GASTO EN SALUD Y GASTOS MÉDICOS
En el sector asegurador se observa un fenómeno similar al anterior en términos de cobertura y gasto. En efecto, las primas de los seguros de Salud, donde se cubre prevención, representan alrededor del 0.3% de las primas totales del sector y las correspondientes a los seguros Gastos Médicos (GM), en donde no se puede cubrir prevención, tiene una participación del 14.5% del mercado total de seguros. Cierto es
que el monto total de las primas de salud son indiscutiblemente menores que las de GM y por lo tanto la penetración es muy baja comparada con la de GMM.
La participación del sector asegurador en la promoción de la salud se da mediante las Instituciones de Seguros Especializadas en Salud (ISES), ya que además de restaurar y rehabilitar la salud del asegurado, proporcionan servicios de prevención y mantenimiento de su salud mediante la atención médica directa y la cobertura de gastos de tratamientos preventivos y correctivos. Sin embargo, a pesar de ser un producto sumamente atractivo para la población mexicana, dada su cobertura y beneficios, hay menos de 300,000 mil asegurados en estos esquemas.
El Sector tiene así un importante compromiso en términos de prevención, lo que significa fortalecer la difusión por las consecuencias económicas que genera la falta de este tipo de acciones, por lo que el sector está promoviendo el que se permita cubrir gastos preventivos en los seguros de Gastos médicos Mayores.
Lo anterior en adhesión con programas gubernamentales encaminados al apoyo de acciones de prevención y propuestas que incentiven hábitos saludables en la población.