La Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS) estima que la pandemia por COVID-19 podría tener un costo de 300 millones de dólares en pagos de indemnizaciones por seguros de gastos médicos y seguros de vida para el cierre del año 2020, lo que significaría un impacto similar al que tuvieron los huracanes Manuel e Ingrid en 2013.
Recaredo Arias, Director General de la AMIS, informó en conferencia de prensa el pasado 16 de julio que a pesar de la notoria aceleración de la pandemia en todas las regiones del país durante los últimos meses, las primeras dos semanas de julio mostraron una disminución en el porcentaje de contagios entre la población asegurada.
Durante el mes de junio se mantuvo un incremento semana a semana de hasta 21% en las cifras de contagio, las cuales se redujeron a 12.7% y 14.8% durante las primeras dos semanas de julio. De igual manera, la cifra de indemnizaciones disminuyó su porcentaje, pasando de 17% registrado al 6 de julio a 13.9% la semana posterior.
Al 13 de julio, las aseguradoras han atendido 4,488 casos de COVID-19 y se han registrado 255 defunciones a través del seguro de gastos médicos, con un monto total en indemnizaciones de mil 931.5 millones de pesos. De igual manera, en seguros de vida se registraron 4,592 defunciones con un costo total de 1,037 millones de pesos.
Juan Patricio Riveroll, Vicepresidente de la asociación, mencionó que hasta el momento la pandemia no se encuentra entre las mayores catástrofes a las que se ha enfrentado la industria de seguros y que aún con el aumento estimado para el resto del año 2020, la crisis por el nuevo coronavirus no se ubicará entre los 10 siniestros más costoso para la industria.
“Aún cuando claramente es un caso importante, no es especialmente grande para lo que hemos vivido en otras situaciones”, expresó Riveroll.
Los sucesos más costosos para el sector asegurador mexicano han sido en primer lugar, el huracán Wilma, en 2015, con un monto de 2,290 millones de dólares, seguido por el sismo del 19 de septiembre de 2017 que representó 1,236 millones de dólares; en tercer lugar se ubica el huracán Odile, en 2014, con 1,232 millones; en cuarto lugar el huracán Gilberto en 1988, con un costo de 1,112 millones de dólares y en quinto lugar el sismo de 1985, con 941 millones de dólares.
Hasta el momento, las aseguradoras han pagado 128 millones de dólares a causa de la actual pandemia, lo cual la ubica en la posición número 18 de los siniestros más costosos que ha registrado la historia de las aseguradoras mexicanas.
Con respecto a la cobertura solidaria, los representantes de la AMIS informaron que se han otorgado 215 indemnizaciones a los familiares del personal de salud que han perdido la vida a causa del COVID-19, con un costo total de 10 millones 750 mil pesos.
Aunque ya se han presentado decesos de personal sanitario en 26 entidades el país, la Ciudad de México y el Estado de México concentran 49 por ciento de las indemnizaciones de la cobertura, con 73 y 34 fallecimientos respectivamente.
Asimismo, según los datos publicados por El Economista, cerca de 46,013 trabajadores de la salud se han contagiado de COVID-19 y más de 683 miembros del personal al frente de la pandemia han fallecido a causa del virus, siendo la Ciudad de México y el Estado de México los estados con mayores afectaciones en el país.
Fuentes:
Conferencia de prensa AMIS, 13 de julio 2020.
El Economista, Julio 2020