Si bien los avances tecnológicos han traído muchísimos beneficios a la humanidad, lamentablemente también vienen acompañados de muchos peligros.
Los ciberataques son un claro ejemplo de ello, pero afortunadamente existen seguros que ayudan a empresas y particulares a mitigar pérdidas económicas y daños provocados por ataques de este tipo.
Los ciberseguros brindan coberturas, en la mayoría de los casos económicas, para que las empresas que sean víctimas de delitos cibernéticos estén protegidas.
Las aseguradoras pueden ofrecer este tipo de protección como una cobertura adicional a una póliza ya existente o, si es el caso, como una póliza independiente.
Las coberturas generales que puede incluir un ciberseguro son las siguientes: privacidad de datos, ciber extorsión y multas asociadas con violaciones de datos. Éstas dependerán de cada aseguradora
Al momento de contratar una póliza de ciberseguridad, la mayoría de los proveedores de seguros le piden a sus clientes que acepten la implementación correcta del equipo y el uso de varias herramientas como antivirus, firewalls, copias de seguridad, etcétera.
Es obligación de cualquier empresa contar con estrategias de seguridad perfectamente trazadas, de lo contrario estarán expuestas a múltiples peligros como
pueden ser: pérdidas económicas, descrédito, robo de datos, clonación de perfiles, fraudes, pérdida de comunicación con clientes, pérdida de información confidencial, espionaje, etcétera.
Todos los riesgos anteriores deberían ser motivo suficiente para que todas las compañías contraten un ciberseguro, pero lamentablemente no es así. De hecho, menos del 50 por ciento del sector empresarial mexicano está protegido contra ciberdelitos.
Muchas empresas consideran innecesario gastar en ciberseguridad, porque no se dan cuenta de que se trata de una inversión que podría salvarlas de la ruina.
Prueba de ello es que el 60 por ciento de las empresas que sufren un ciberataque, no logran sobrevivir más de seis meses después de haberlo padecido, principalmente porque las consecuencias pegan directamente en el ámbito financiero y en la pérdida masiva de clientes.
Si alguna empresa desea contratar un ciberseguro, debe tomar varios factores en cuenta: la sensibilidad de los datos que tiene a su disposición, la industria a la cual pertenece y el tamaño del flujo de ingresos.
Además, se debe tener muy claro que los ciberataques se pueden producir en cualquier momento y que por ninguna razón se pueden subestimarlos, ya que las consecuencias pueden ser insalvables.
Ningún negocio debe permitirse escatimar en materia de seguridad, por esa razón los ciberseguros deben de verse como un poderoso aliado que ayuda a mitigar infinidad de riesgos.