Actualmente las pequeñas y medianas empresas (PYMES) en el país generan el 72% de los empleos y el 52 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) nacional, sin embargo, sólo el 35% de estas empresas cuentan con la protección de un seguro, de acuerdo con cifras de la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros, AMIS.
Tal condición señala un alto riesgo para este tipo de empresas que hoy por hoy participan de manera muy importante a en nuestro aparato productivo, pues ante la ocurrencia de un siniestro, pueden tener graves consecuencias como la pérdida del patrimonio y el cierre del establecimiento.
El clima y la ubicación geográfica: grandes enemigos.
Los cambios climatológicos que hoy están generando catástrofes sin precedentes son un riesgo clave ante el cual se debe estar protegido. Esta situación es fundamental considerar, si agregamos que en nuestro país, por su ubicación geográfica, el 60% de su territorio está expuesto a riesgos naturales de tipo hidrometeorológico y geológico. Baste decir que sólo en 2013, los daños materiales ocasionados por tales fenómenos sumaron 61 mil millones de pesos.
Pérdidas materiales por diversas causas.
Una empresa nunca está exenta de sufrir de algún robo, incendio o accidente que dañe su propiedad, productos, mercancías, vehículos, equipos de trabajo, etc., cuya pérdida afectaría o impediría continuar con su operación, poniendo en riesgo la inversión y el patrimonio.
La responsabilidad civil frente a terceros.
Derivado de la propia operación de la empresa o de sus productos, existen riesgos que de ocurrir, pueden afectar a terceras personas.
Datos de la Secretaría de Economía revelan que alrededor del 20% de las PYMES quiebran a los dos años de haber iniciado sus operaciones, y uno de los principales factores de ello, lo constituye la falta de previsión ante los riesgos arriba mencionados, por lo que contar con la protección de un seguro, contribuiría a aminorar las pérdidas ante tales eventualidades.
Los principios y obligaciones de una empresa, independientemente de su tamaño, deben considerar como objetivo prioritario observar y fortalecer su comportamiento honesto y responsable, en beneficio propio y para generar seguridad y confianza hacia sus proveedores, clientes y empleados.
Es por tanto que, para lograrlo, las empresas deben buscar instrumentos de previsión que les apoyen a dar continuidad a su proyecto de crecimiento.
Para el sector asegurador y para la economía del país que las PYMES son muy importantes; y es en tal sentido, que las compañías de seguros han desarrollado esquemas específicos de protección para este tipo de empresas.
Las aseguradoras cuentan con una amplia oferta de planes de protección, que implican una serie de coberturas de contratación individual e integral, entre las cuales se encuentran las siguientes.
Modalidades de contratación.
Coberturas.
Existe un plan para cada necesidad, en función de coberturas, sumas aseguradas y condiciones.