A inicios de julio, el Congreso de la CDMX aprobó varios cambios en la Ley de Movilidad con el fin de incrementar la seguridad, tanto para conductores como peatones, a través de mejores prácticas y sanciones más severas para los infractores.
Estos ajustes se dan bajo el Segundo Decenio de Acción para la Seguridad Vial 2021-2030 de la ONU, al cual está alineado el gobierno mexicano.
Estas son las modificaciones aprobadas por el Congreso local, con base en las peticiones realizadas por la jefatura de gobierno:
Con esta modificación, los vehículos de transporte público deberán contar con un seguro que cubra mínimo 4.4 millones de pesos y que esté certificado ante la Comisión Nacional de Seguros y Fianzas.
Además, los conductores de estos vehículos deberán someterse a pruebas de detección de alcohol o narcóticos al momento en que ocurra un accidente vial.
De acuerdo con un comunicado emitido por el Congreso, la Secretaría de Movilidad de la Ciudad de México (Semovi), tendrá la facultad de dar seguimiento a los incidentes de tránsito, específicamente de aquellos provocados bajo la influencia del alcohol o de alguna otra sustancia.
La Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) podrá retener la licencia de los conductores que, en estado de ebriedad o que hayan consumido sustancias tóxicas, se hayan involucrado en siniestros vehiculares.
Asimismo, la Semovi podrá suspender la licencia de estos conductores de acuerdo con diferentes escenarios, señala la nueva Ley de Movilidad que:
Aumento de sanciones penales para aquellos conductores que cometan un delito, como el homicidio o lesiones hacia una tercera persona, considerando los siguientes factores:
Además, resaltaron la obligación de contratar un seguro de automóvil con cobertura de responsabilidad civil para estar protegido legal y financieramente ante un accidente.
Con la finalidad de garantizar un transporte público sin discriminación, con perspectiva de género y bajo estándares sustentables, el Congreso nombró a la Secretaría de las Mujeres como consejera permanente.
Su tarea central será generar iniciativas para erradicar la violencia de género y hacer del transporte público un espacio más incluyente.
El objetivo general es mejorar la seguridad vial en el mundo; la nueva meta de este segundo periodo es reducir al 50% las muertes y lesiones ocasionadas por accidentes de tránsito para el 2030.
Mediante el Programa Sectorial de Comunicaciones y Transportes 2020 – 2024, el Gobierno de México incorpora cuatro iniciativas principales para contribuir al alcance de esta meta:
Fuentes: